Este fin de semana hemos podido disfrutar de un acontecimiento extraordinario una exhibición llamada la Batalla de Leyendas en la que Kasparov ha vuelto a jugar unas partidas contra el ingles Nigel Short, en la que el ruso ha demostrado que el que tuvo retuvo.
Kasparov nos ha deleitado con un juego realmente imaginativo que ha recordado al Kasparov de las mejores épocas, es increíble su capacidad para inventar y arriesgar en cualquier tipo de posiciones, está claro que este tipo de juego difícilmente podría enfrentarse al juego de Carlsen que aceptaría los sacrificios del ruso con la frialdad de una maquina pero no cabe duda que Kasparov seguiría en la élite mundial si no se hubiera retirado, pero a Kasparov solo le valía ser el mejor.
El evento servía de presentación para el circuito de torneos de super-elite llamado Grand Chess Tour, que constara de tres eventos:
- Norway Chess del 15 al 26 de junio
- Sinquefield Cup del 21 de agosto al 3 de sepriembre
- London Chess Classic del 3 al 14 de diciembre
En estos eventos jugaran los nueve mejores jugadores mundiales y un invitado en cada torneo con mas de un millón de dolares en premios.
A continuación veremos las diez partidas del duelo entre Kasparov y Short y disfrutaremos del talento del ogro de Baku, la primera y la sexta partida se jugaron a un ritmo de 25 minutos más 10 segundos por jugada y el resto a 5 minutos más tres segundos por jugada, con la particularidad de que no se incrementaba el tiempo sino que se retrasaba el arranque de cada jugada con lo que realmente no se incrementaba el tiempo con lo que era más fácil la caída de bandera y los apuros mas angustiosos.
Con seguridad estas partidas habrán servido para comprobar que el que tuvo retuvo.
