Carlsen nos volvió a asombrar sacando petroleo de una ventaja microscópica en otro gran final.
Ver jugar los finales a Carlsen es tan instructivo que después de ver sus maniobras sólo se puede pensar ¿pero realmente es posible jugar mejor este final? Continuamente busca planes que le dan dos alternativas y cuando su rival consigue evitar una, él se va por la otra generando nuevas posibilidades hasta que su rival abrumado acaba no encontrando la mejor opción y cae fulminado.
El final de hoy es de esos que la gran mayoría de los mejores jugadores del mundo desistirían de jugar porque el riesgo de dejar los peones del flanco de dama blanco asusta tanto que es mejor conformarse con el medio punto, pero Carlsen parece guiado por una sabiduría especial para encontrar los caminos ganadores en posiciones extremas con la facilidad de aquellos que conocen los vericuetos que cada posición tiene.
Carlsen no necesita un juego espectacular para ganar a su rival, va acumulando mínimas ventajas y las va trasformando hasta lograr la victoria en el final con ideas y planes tremendamente difíciles de encontrar.
El match queda ahora con ventaja del noruego por 4 a 2, y con la sensación de que Anand va a tener que jugar arriesgando enormemente en busca de posiciones de ataque que no lleven la partida al final, pues queda claro que superar en un final a Carlsen es toda una quimera.
Para los aficionados al ajedrez, sería un gran acicate que el campeón Anand logrará una victoria en la próxima partida para mantener viva la llama de este encuentro, pero para la historia del ajedrez volver a asistir a otro gran final de Carlsen que acrecentara su victoria nos volvería a dar a otra figura mediática como en su tiempo lo fueron Fischer y Kasparov, a la espera de la aparición de una nueva estrella que pueda desafiar la precisión del joven noruego.
Os dejo con los comentarios de esta sexta partida, esperando con gran interés la partida del lunes y como plantearan ambos jugadores la misma.
Escribiendo por no aburrirme