Lejos queda la época gloriosa del ajedrez en Cuba, marcada por la figura de José Raúl Capablanca y Graupera. Lejos quedan aquellos torneos magistrales en los clubes de ajedrez de la Habana, en los que se reunían los mejores jugadores de ajedrez del mundo, escaparate de un ajedrez en Cuba en pleno esplendor, eventos motivadores de futuras generaciones de ajedrecistas cubanos. ¿Qué queda hoy de todo aquello?
Fuga de talento del ajedrez en Cuba
El GM Leinier Domínguez Pérez fue el primero en marcharse, solicitó el cambio de federación el 17/09/2018. Tuvo que esperar dos años sin competir en ningún evento oficial. Desde 19/12/2020 ya puede jugar competiciones oficiales bajo bandera americana.
El GM Yuniesky Quesada Pérez fue el siguiente en marcharse, solicitó su cambio de federación el 17/04/2019. Podrá representar en competiciones oficiales a la Federación de USA desde el 17/04/2021.
El GM Lázaro Bruzón Batista ha sido el último en marcharse, solicitó el traslado de federación el 19/03/2020. Tendrá que esperar a 19/03/2022 para poder representar a Estados Unidos en competiciones oficiales.
Si hacemos una radiografía del ajedrez en Cuba comparando el elo medio de los 10 primeros jugadores de ajedrez del ranking Fide a finales del 2017 antes de que se produjera las primeras fugas de talento con el elo medio en la actualidad, podemos concluir que la fuerza del ajedrez en Cuba ha pasado de un elo medio (en 2017) de 2579 a un elo medio (en 2021) de 2535.
Las imágenes de los ranking son de por sí esclarecedoras, el equipo cubano de ajedrez ha quedado irremediablemente tocado, a pesar de la ascensión de futuras promesas como GM Carlos Albornoz, GM Yaser Quesada y GM Luis Ernesto Quesada, estos dos últimos hermanos del GM Yuniesky Quesada.
Lo cierto es que esto acaba de empezar si nos atenemos a la modificación del reglamento de transferencias de jugadores de ajedrez que ha anunciado la FIDE: por una parte, rebaja de la tarifa de notificación de traslado que pasa de 250€ a 50€ y por otra, la vinculada al tiempo de espera para el cambio, anteriormente el ajedrecista debía aguardar sin actividad en los tableros dos años después de hecha la reclamación, ahora “este período de dos años comienza a contar desde el momento en que el jugador ha competido en su último evento oficial de la FIDE en representación de su federación anterior, independientemente de cuando inicie la transferencia”.
Desde la federación cubana de ajedrez y desde ciertos medios de prensa más intolerantes se han volcado críticas e incluso insultos a estos jugadores de ajedrez expatriados, os dejo enlaces de artículos al respecto. Bajo mi punto de vista estas críticas y ya no digo insultos son del todo infundadas e irrespetuosas.
La vida de los deportistas de élite es efímera, en el ajedrez también. Parece razonable que la flor y nata de los jugadores de ajedrez cubanos busquen oportunidades en otros lugares. Es triste, pero entendible.
Cuba es el paraíso caribeño, por sus playas de arena blanca y arrecifes de coral, por sus cayos virginales, por sus paisajes, por su gente, por su cultura, por su comida, por su sempiterna Habana, por tantas otras cosas. Nadie reniega voluntariamente al paraíso salvo que la vida en él suponga duras condiciones. ¿Acaso os imagináis a Messi si hubiera nacido en Cuba jugando en divisiones inferiores de la isla?.
Hay que asumirlo, a mí también me gustaría ver un equipo olímpico de ajedrez cubano con Leinier Domínguez, Lázaro Bruzón, los hermanos Quesada Pérez, etc., luchando en los primeros puestos de una olimpiada de ajedrez. Pero para ello, se ha de repensar la estrategia de apoyo al ajedrez en Cuba, se han de buscar patrocinadores, se ha de apoyar el ajedrez de base, en definitiva se ha de retener el talento, creando las condiciones adecuadas para el desarrollo del ajedrez, no desde la amenaza o la crítica sino desde el apoyo incondicional.
Cuba tiene un enorme potencial, es forjadora de grandes jugadores de ajedrez y por ello espero y supongo que todos esperamos, volver a ver el esplendor del ajedrez en Cuba y ¿por qué no? un nuevo campeón mundial de ajedrez cubano.
Desde que era pequeño me encantan todos los juegos de mesa en especial los de componente estratégico como el ajedrez. Espero que los artículos sobre ajedrez sean de vuestro agrado.